Con sus variados paisajes y una historia fuertemente marcada por los Habsburgo, Austria es uno de los destinos inevitables durante los itinerarios que realizan los trenes turísticos por Europa Central, haciendo una parada fundamental en su capital, Viena. Entre los grandes clásicos de este tipo de viajes se encuentran los recorridos Venecia-Viena, partiendo desde la Estación de Santa Lucía, o Viena-París. Algunos itinerarios también pueden incluir una vuelta por Budapest.
En el territorio austriaco, déjate conquistar por la belleza de los paisajes del Oeste y del Norte del país, donde dominan las puntiagudas cimas de Los Alpes. A continuación, a lo largo de la línea ferroviaria, descubre las altas cumbres alpinas cubiertas de nieve y los hermosos valles en los que se agrupan algunos pueblos. El Danubio también es un elemento indisociable del paisaje austriaco. El río te ofrece bellas y románticas escapadas al ritmo de los Valls de Schubert o de Strauss.
A bordo de un tren de lujo, durante un viaje por Austria tendrás la oportunidad de disfrutar de un romántico paseo por el corazón de Viena. Formando parte del paisaje vienés, las orillas del río Danubio son, también, lugares perfectos para vivir momentos de puro relax gracias a sus exuberantes jardines, sus cafés y sus restaurantes. Aun siendo una capital moderna, Viena conserva la herencia arquitectónica dejada por los Habsburgo. Sin lugar a dudas, todas las visitas durante una escala en la ciudad pasan por un tesoro incluido dentro del Patrimonio Mundial de la UNESCO, el Castillo de Schönbrunn. Joya del estilo barroco, este palacio te propone una visita única en cuanto a la historia de María Antonieta pero, sobre todo, en relación a la famosa emperatriz Isabel de Baviera, más conocida con el nombre de Sissi. Otro monumento que evoca la opulencia de Viena durante la época de los Habsburgo es, por ejemplo, el inmenso Palacio Imperial de Hofburg, otra de las residencias de la familia real, situado en uno de los bulevares más bellos de capital, el Ring.
En la capital de Austria también podrás visitar el MuseumQuartier, un barrio único donde lo antiguo y lo moderno se unen en perfecta armonía. Este sector se extiende en la zona antiguamente destinada a los Establos Imperiales, presentando en la actualidad un conjunto de edificios contemporáneos y construcciones barrocas que acogen tiendas, cafeterías y restaurantes. Para tomar el pulso de la ciudad, no olvides recorrer sus mercados como, por ejemplo, el gran mercado de abastos de los sábados, Naschmarkt, que el resto de la semana presenta productos típicos del territorio austriaco. También está considerado como el lugar ideal para degustar la famosa cocina vienesa en la terraza de un “schanigarte” o en un “beisl”, la posada tradicional de Viena.